Hoy en infantil hemos vivido una mañana muy especial: ¡nuestra propia vendimia!
Los niños y niñas llevamos racimos de uvas de casa que pudimos observar, tocar y compartir con mucha ilusión y nos hemos convertido en pequeños viticultores por un día.
Primero, estuvimos separando las uvas del racimo una a una, con mucho cuidado, mientras descubríamos su olor, su textura, su color y ¿por qué no decirlo? su sabor también, ya que alguna que otra se nos ha escapado a la boca.
Pero el momento más esperado, llegó después del recreo: ¡PISAR LAS UVAS!
Con los pies descalzos, los pantalones remangados y unas sonrisas de oreja a oreja, hemos visto como el mosto empezaba a aparecer a medida que íbamos pisando fuerte nuestras uvas entre ánimos del resto de compañeros.
Para terminar, pudimos probar el resultado de ese zumo elaborado con nuestro esfuerzo y entusiasmo.
Ha sido una experiencia muy divertida, llena de risas y aprendizaje, que nos ha permitido acercarnos de forma vivencial a una tradición muy nuestra y típica del otoño.
¡Un día de cole para guardar en la memoria!
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