Después hicimos un pequeño descanso para almorzar.
Con las pilas cargadas fuimos a ver distintas construcciones hechas con adobes y nos pusimos manos a la obra, envolvimos tierra, paja y agua y con unas azadillas a revolver hasta que la masa estuvo en su punto para hacer adobes.
Envolvimos nuestros adobes y nos les trajimos de recuerdo.
El último taller que hicimos fue de rosquillas, fue muy divertido y además las rosquillas estaban riquísimas. Nos hemos traído la receta para poder hacerlas en casa con nuestra familia.
¡Nos lo hemos pasado genial!
No hay comentarios:
Publicar un comentario